Este imparable escritor, guionista y director audiovisual no deja de sorprender, su virtuosa pluma parece no descansar y su imaginación desbordante hace viajar al espectador por lugares a veces incómodos, pero sobre todo sorprendentes. “Mis personajes siempre van a ser claros y oscuros, eso hace que el telespectador entre en una dualidad, porque tal como en la vida misma, los buenos no pueden ser siempre buenos y los malos siempre malos”.
Su primera teleserie fue la icónica “Adrenalina” (1996), después escribió “Playa Salvaje” (1997) y “Fuera de control” (1999) las tres para canal 13. “Me fui a Estados Unidos y a la vuelta escribí mi primera novela que hablaba sobre el mundo de la televisión “Una mujer brutal” en el año 2000 y seguí trabajando en el 13 un tiempo, hice “Machos” y después me fui a TVN y empecé a trabajar con Quena Rencoret. Tengo muy buenos recuerdos de esa etapa porque la Quena me dio la posibilidad de hacer teleseries que me gustaban mucho como espectador, tales como “Alguien te mira” y “Dónde está Elisa”. Fue un momento importante en mi carrera porque empezamos a armar el género del thriller bien a la chilena, con teleseries nocturnas que hasta el día de hoy siguen presentes en el público que ve teleseries de noche”. Como olvidar “Alguien te mira, “¿Dónde está Elisa?” y “Perdona nuestros pecados”.
Con “Generación 98” fue distinto. Recuerda que la invitación del canal fue a hacer una comedia generacional. “Al principio la idea era hacer algo más liviano, que finalmente resultó en esta terrible historia de bullying. Me sorprende lo que ha generado en la audiencia, uno se da cuenta que hay una cantidad tremenda de personas de esa generación y de las que vinieron después, que fueron víctimas de bullying y eso ha producido una identificación de parte del público”.
“En Generación 98 me pasó algo que nunca me había pasado antes, llegué a soñar en guión: escena uno estoy despertando, escena dos estoy abriendo un ojo”, ahora se ríe y lo cuenta como una anécdota, pero asegura que fue agotador. Porque así con esa sonrisa y su buen humor, Pablo Illanes es absolutamente un apasionado de su trabajo y no puede soltar a sus personajes ni dejar la historia hasta que esté perfectamente terminada. “Había días que pasaba catorce horas frente al computador, para mí la continuidad diaria es muy importante, si dejo de escribir un día me cuesta mucho retomar después, es una verdadera pesadilla, sobre todo en estas teleseries corales donde hay ocho protagonistas”.
El 5 de junio de 2023 se estrenó “Generación 98”, la teleserie nocturna en donde siete excompañeros de colegio se reencuentran en una reunión de curso, después de veinticinco años sin verse. “A las historias hay que ir poniéndole aliños, es como ir dándole cierto gusto a un caldo para que quede más rico, la enjundia es muy importante, es la manera en que se va contando la historia para que el público se entretenga y enganche”. Y sin duda, los ingredientes fueron perfectos. Actualmente, la teleserie que está en la recta final se mantiene entre los programas más vistos de la televisión chilena y obtuvo el Premio al Mejor Guión.
Y si de éxitos y estrenos se trata, Pablo Illanes tiene experiencia de sobra. Sostiene que escribir para una audiencia tan grande y diversa como la de Netflix, fue una tremenda y enriquecedora experiencia. “Antes de la pandemia, recibí una invitación de parte de Roberto Stopello, director ejecutivo de la plataforma de streaming, con quien ya había trabajado anteriormente en Telemundo, en la que me pedía que le presentara propuestas, me preguntó: ¿Qué te gustaría escribir en este momento? Inmediatamente supe que responder: “Me encantaría escribir un thriller erótico”.
Y así fue como el 31 de mayo de 2023 se estrenó “Perfil Falso” su primera serie para este gigante del streaming. La historia, de esta serie de 10 capítulos, surgió porque hace varios años, unos amigos le advirtieron a Pablo que alguien estaba usando su cuenta de Instagram. “Tenía fotos mías con mi familia, lo encaré y me sorprendió el desparpajo con que me respondió, con una soltura de cuerpo que me pareció fascinante, en ese momento pensé: aquí hay algo interesante”. Y agrega: “Así nacen las historias, donde encuentro una rareza, algo único que se puede desarrollar”.
“Perfil falso”, intenso drama erótico sobre una mujer que busca al hombre de sus sueños en una aplicación de citas, se convirtió en la serie de habla no inglesa más vista de la plataforma en todo el mundo, ubicándose durante seis semanas en el top 10 de los listados de 82 países. “Antes del estreno todo el mundo sabía de la serie y apenas salió al aire, de inmediato se empezó a ver en todas partes del mundo, es fantástico contar con todo ese apoyo y ver cómo la serie va traspasando fronteras”, cuenta este versátil guionista que lleva una carrera de más de 25 años.
Estuvo encantado de trabajar con el equipo colombiano, además del talento de los actores, Illanes cuenta que quedó gratamente sorprendido del apoyo que el Estado le otorga a los proyectos cinematográficos y audiovisuales, con el propósito de dar a conocer la cultura y sus maravillosos paisajes, lo que además genera fuentes de trabajo y permite que la industria cinematográfica local, tenga un incentivo para la realización de películas.
Con respecto a la situación local asevera todo lo contrario: “A pesar de que ha habido un crecimiento exponencial del audiovisual chileno, nuestra industria produce poco y eso hace que no existan suficientes plazas de trabajo, aunque tengamos los Premios Goya y los Oscar, somos muy pocos los guionistas que podemos vivir de nuestra profesión”.
Recuerda que en el 1996, se firmaban contratos en donde los guionistas cedían los derechos de explotación de las teleseries por diez años, periodo en donde el canal podía repetirla cuantas veces quisiera sin pagar una remuneración a los que habían creado la historia. Por eso enfatiza: “Los guionistas, y sobre todo los guionistas nuevos, deben mantener una sola premisa: lo más importante es el guión. El único personaje que se enfrenta a la página en blanco cuando no hay nada, es el guionista. Somos la primera rueda del carro, sin esa rueda no hay tren”.
Con respecto a los derechos de autor Illanes dice que en Chile aún es todo muy precario. “Si no fuera por ATN me sentiría absolutamente perdido, nadie nos enseña a pelear por nuestros derechos. Probablemente si nuestras carreras se hubieran desarrollado en otros países como México o España, alguien nos hubiera orientado al respecto. Nosotros tuvimos que aprender sobre la marcha. Todo lo que ha conseguido ATN por los autores audiovisuales es tremendamente valioso”
